Acceder, completar y aprender: los tres desafíos de la escuela media
Columna de opinión de Víctor Volman, director del Observatorio de Argentinos por la Educación.
La secundaria es obligatoria en Argentina desde 2006. Si bien los avances son importantes, quedan muchas cuentas pendientes. En estas líneas revisaremos tres desafíos clave.
Acceder. Los datos de UNESCO muestran que en Argentina, en 1998, 74% de los jóvenes en edad de asistir a la secundaria estaban escolarizados en este nivel. En 2006 era el 78%. En la actualidad es 91%. Por lo tanto, si bien se avanzó mucho, aún resta incluir un porcentaje de la población.
Completar. Pero no todo es acceder. Desde el Observatorio de Argentinos por la Educación encontramos que de cada 100 alumnos que empezaron primer grado en 2009 solo 53 llegaron al final de la secundaria en 2020,: la mitad de una cohorte completa los estudios obligatorios en el tiempo esperado. Del resto, unos abandonan para siempre y otros terminan la secundaria más tarde. Según la Encuesta Permanente de Hogares, la proporción de población entre 18 y 24 años con al menos título secundario era de 58% en 2003 y es de 67% en 2021. Hay mucho por crecer.
Aprender. Acceder y completar sirven para aprender. Pero solo una pequeña proporción de estudiantes del último año del secundario se ubica en los mejores niveles de desempeño: apenas el 30% de quienes llegan al final de la secundaria en el tiempo esperado obtienen resultados satisfactorios o avanzados en las pruebas Aprender. Eso significa que solo 16 de cada 100 estudiantes que comienzan la primaria llegan al final de su escolarización en el tiempo esperado y con los niveles de aprendizaje adecuados para continuar estudios superiores o insertarse en el mercado laboral. Solo 3 de esos 16 son de los niveles socioeconómicos más bajos.
El mercado laboral reconoce el valor del título secundario. El 30% de la población de 25 a 29 años con al menos el secundario completo cuentan con un trabajo “de calidad” (más de 30 horas semanales en un trabajo que les hace descuento jubilatorio). El porcentaje baja al 9% entre quienes no tienen el título secundario.
Acceder, completar y sobre todo aprender son tres desafíos de la secundaria. Necesitamos una agenda consensuada con propuestas claras, recursos adecuados y metas alcanzables para lograr una educación con inclusión, equidad y calidad.