Una fiesta sorpresa para entregar manos hechas con impresoras 3D
Las fabrica Gino Tubaro, un emprendedor de 21 años
Por Myriam Selhi
«Silencio, viene Spiderman!» Todos los niños –y los no tan niños también– soñamos alguna vez con tener un súper poder: volar, ser invisible, teletransportarnos, como los personajes de los comics y programas de nuestra infancia. Suena el timbre del Atomic Lab de Parque Patricios y Gino Tubaro, fundador y director de 21 años, pide a todos los voluntarios presentes que colaboren para brindar la sorpresa de su vida a un niño de 6 años.
La puerta se abre y una lluvia de aplausos cae sobre Santino, ojos como platos y vestido con el traje rojo y azul de su ídolo. Sus padres los trajeron a Atomic Lab de sorpresa, sin decirle que se iba a encontrar con una fiesta donde le iban a regalar una mano de Spiderman. “Superhéroes” fue el tema elegido para el cuarto Manotón, el evento de distribución gratuita de manos prostéticas fabricadas con impresora 3D por el equipo del joven inventor Gino Tubaro.
Santino es uno de los veinte niños que vienen a buscar una prótesis y la suya tendrá lanza-tasos y los colores del hombre araña. Unos 30 voluntarios están reunidos en distintas mesas para ensamblar las piezas que se estuvieron imprimiendo toda la semana. El niño, aún en el asombro, mira la escena quieto, sentado en una de ellas entre sus padres. Su paciencia será recompensada en aproximadamente dos horas, el tiempo de armado del elemento que completará su kit de superhéroe.
La mano también le servirá para tareas más cotidianas, como atarse los cordones o agarrar un vaso, o para su actividad favorita, construir con bloques de encastre.
“La idea de este Manotón fue revertir una situación que a veces es socialmente difícil para algunos chicos y transformarla en oportunidad de ser un superhéroe”, define Gustavo Pérez, a cargo de la logística del laboratorio solidario. Pérez recibe desde hace meses los pedidos de prótesis gratuitas a través de Facebook y de la plataforma LIMBS, donde los padres mandan las medidas exactas del muñón de su hijo para que sea creado con impresora el miembro correspondiente.
«Yo quiero ser Iron Man», afirma inapelable Juan Francisco, de 5 años, que nació sin dedos en su mano derecha. Cuando se le pregunta qué piensa hacer con su nueva mano, contesta con soltura “No sé, veré”. Sus padres se pusieron en la lista hace meses y será la primera prótesis de su hijo. “La barrera económica de una prótesis convencional es importante y más a esta edad, donde crecen rápido», precisa Juan Ignacio Achar, su padre. «Pero queremos tomar esto más como un juego, a ver si este es un camino que le pueda servir. El aspecto lúdico lo hace más atractivo”.
Hay globos en el techo y caramelos en las mesas, el ambiente es festivo y colaborativo: Sodimac aportó las herramientas y las sillas para los presentes, Arcor pone las golosinas, United Airlines regaló el catering y las impresoras se compraron con el dinero del concurso «Una idea para cambiar la Historia», de History Channel, que Gino ganó en 2015. Los voluntarios están por familiares u oyeron del proyecto y quisieron participar. «Nosotros tres somos scouts, nos enteramos de esto por Facebook y nos pareció una iniciativa interesante».
A pocos metros, Candela, 11 años, espera que digan su nombre y le asignen una mesa. «A mí me gusta Iron Man, pero mi mamá pidió Spiderman. La verdad, no me molesta: yo quiero tocar el bombo». Romina Cabral, su madre, se disculpa que se enteró a último momento del evento y de la posibilidad de obtener una prótesis de manera gratuita. «No podía creer que existiera esto, me apuré y puse el primer superhéroe que se me ocurrió». A Candela le gusta la murga y, sobre todo, tocar el bombo. Nació sin dedos en su mano izquierda y con la prótesis podría manejar el platillo de arriba con una mano, mientras con la otra golpea el parche del bombo con la masa.
El cuarto Manotón llevó a casi 500 la cantidad de prótesis distribuidas gratuitamente: unas 80 se otorgaron en los manotones anteriores de Buenos Aires, Montevideo y de la ciudad mexicana de Guadalajara, y el resto por envío. Todavía tienen 3.500 pedidos en espera. Gino Tubaro tiene la mente puesta en el próximo manotón, que podría ser en cualquier lugar del mundo. En Argentina, la idea de un manotón en Rosario está en el aire hace tiempo. La Fundación Lionel Messi manifestó su interés en participar. «Donde haya interés y necesidad, iremos con gusto a ayudar”, confirma Tubaro, fiel al espíritu de los superhéroes.